El Pacto estratégico-tecnológico, conocido como AUKUS (Australia ,United Kingdom, United States), incluirá a Australia en el exclusivo club de países con submarinos de propulsión nuclear, un tipo que permite desplazamientos mucho más largos sin necesidad de salir a la superficie. Hasta ahora, solo otras seis naciones cuentan con esas naves: EE UU, China, Rusia, Reino Unido, India y Francia. Australia será el único miembro que no cuente con un programa nuclear propio, sea militar o civil.

También lo dejó claro el primer ministro Morrison: “Australia no busca adquirir armas nucleares ni desarrollar una capacidad nuclear civil. Continuaremos cumpliendo con todas nuestras obligaciones de no proliferación nuclear”. Pese a todas las salvaguardas, el anuncio puede ser interpretado en Teherán como una vía libre para seguir adelante con su programa de enriquecimiento de uranio, según varios observadores.
COMENTARIO DE LA REDACCIÓN
Consecuencias Geoeconómicas.
Para decirlo en palabras del períodico español El Mundo al referirse al tema , “primero fue el cabreo, luego los interrogantes y al final la acción”.
El Pacto Anglósfero o Pacto antichino del AUKUS, al implicar la venta de submarinos americanos de propulsión nuclear a Australia y, a su vez, la ruptura de un mega contrato naval con Francia, desató el jueves la ira de la diplomacia francesa.
En efecto, París tomó esta noche de viernes 17 de septiembre de 2021, la decisión de llamar a consultas a sus embajadores en Washington y Canberra por la “excepcional gravedad“.
Períodicos como Le Fígaro y Liberation han hablado de “Traición en aguas profundas” y de “Trafalgar indopacífico”.
Fuentes El Mundo,The Diplomat,The Strategist
Imágenes El Snorkel, marinetechnologynews.com, Le Fígaro